A propósito del universo de Beckett:
- Si lo existente en Descartes encuentra un fundamento en el «yo soy», la escritura de Beckett se ríe de esa certeza moderna. Esa cosa cierta, y a ciencia cierta existente, esa cosa que piensa, es desplazada por una existencia que titila, que es hablada, que no es dueña de las palabras; un pensar sin agente que no tiene como garante a ningún Dios, una existencia que puede devenir viento, soplo, o vapor, como se lee en la novela Molloy ... Allí se leen pasajes que ponen en cuestión algunas de las lógicas que sostienen firmemente las formas actuales de lo humano. Molloy aparece como existencia que se olvida del nombre, velocidad impersonal que olvida eso que llaman «su» historia, olvida lo que venía a hacer, lo que hizo, lo que debería haber hecho; vive sabiendo que "al despertar no siempre se acordará de quién es" "Sí, a veces no sólo me olvidaba de quién era, sino de que era, me olvidaba de ser" (Beckett, 1951)
Clasificaciones: Teatro, Adultos
- EL TINGLADO TEATRO (2016)